Imágenes del naufragio. El último bimestre del primer año de MM

Arrancamos el mes poniendo unos gráficos que ponen en discusión la misma idea que venimos trabajando en los últimos meses.

La idea es que la economía es permanente tensión. Sin generalizar en todo el mundo: el contexto es la Argentina. Cuando se toman decisiones redistributivas en la Argentina a todos les va bien, cuando no se toman decisiones redistributivas, sino que se toman decisiones a favor de la concentración capital-trabajo a favor del primero, resulta que le va bien al primero.

Vaya novedad.

El objetivo es mostrarlo con algunos gráficos. Incompleto, claro, requiere más análisis para revisar actores ganadores, actores que ganan pero no conducen el modelo de acumulación y perdedores. Ayudita: estos últimos son los sectores más vulnerables de la economía. Los trabajadores quedan también por ahí, pero van empatando a medida que van creciendo en la escala de ingresos. Para que no quede en el aire, los ganadores más grandes del sistema actual son los bancos extranjeros, las multinacionales, sobre todo vinculadas a energía, pero también las que tienen usuarios cautivos (más inelásticos respecto de tarifas), y los sectores agroexportadores. En términos geopolíticos la presencia de la influencia de Estados Unidos en las decisiones es claramente superior a la que existía hace un año (esto no queda graficado pero no es menor).

Empleos informales, la mayoría de los jubilados, los jóvenes sin empleo, los sectores vulnerables en general sufrirán las consecuencias del modelo. Es decir, los que ya sufrían antes sufrirán aún más.


Clásico gráfico donde se puede ver lo que sube y lo que baja. Es una época de asimetrías porque todo lo que está bajando viene de arriba, después dejará de bajar en las comparaciones interanuales, pero el lado derecho seguirá subiendo mucho más, hasta que se "estabilice" en la comparación interanual.

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Lo que sigue es la venta de autos y camionetas según Acara. La Hilux se vende más que el Gol. Notable.

Si uno mira la EPH, y las variaciones de las media de ingresos por decil en los últimos años, se encuentra que nunca fue tan alto el contraste entre el decil que más gana y el que menos. De hecho, resulta interesante notar que para que el decil más pobre le gane a la inflación debe crecer más que el más rico.  

 

En el cuadro de gastos del Estado nacional se puede ver que los gastos de capital (los que nos son corrientes, más vinculados a inversiones) en septiembre contra una inflación de 42,7% (Bein, entre septiembre de cada año) bajó un 43% real. Ésta es la contribución al futuro y a la infraestructura que el Estado nacional está realizando por esta época. En picada.

Lo que sigue ya es más estructural que coyuntural. Dos gráficos que muestran relación positiva entre la creación de empleo industrial, la creación total (en ambos casos registrados) y la disminusión del desempleo. Se da la casualidad que ahora sube el desempleo y cae el empleo industrial. No, no es una casualidad.

La evolución.

Agrego un gráfico más. Para que se vea que la presión tributaria (consolidada) no es un factor intrínseco de destrucción de la economía, al contrario, sino que cuanto mayor es, todo el sistema puede mejorar (claro, abusar de esto puede enfurecer a los contribuyentes más grandes y crear más problemas, disculpen el análisis en gris, como la vida).  La flecha indica el momento en que se supera la presión de 2001, en 2008, coincidiendo con las presiones y tensiones de la economía, que al iniciar un camino de superación encuentra límites estructurales, que en parte se reflejan en una mayor inflación (que, una vez más no es mala en sí mismo en valores no muy altos, es consecuencia de las modificaciones en al patrón productivo, y por tanto inevitable en un país como el nuestro, cuando mejora).

Fuente: elaboración propia sobre datos del FMI